«Un bono argentino de 100 dólares vale 38% de paridad, uno de Perú, que se llevó puesto a dos presidentes recientemente, vale 99% de paridad. No es un problema político, es un problema de falta de compradores».
«No hay compradores por falta de expectativas futuras. Lo que me asusta no es que sea barata la Argentina, lo que me asusta es que nadie quiere invertir».
«Problemas políticos y grieta hay en todos lados, pandemia hay en todos lados. Yo creo que acá estamos perdiendo la esperanza en un cambio a futuro».
«Perú creció 20%, Brasil creció un 12%. En Argentina tuvimos algo de estabilidad, pero en la región hubo más crecimiento. No sé si ponerme contento. Estamos mejor, pero perdimos mucho terreno. No nos conformemos con tan poco».
«Me equivoqué. Fue culpa mía. No es la primera vez que me pasa. Ya no sirvo en esto. Confundo la esperanza con la expectativa. Dije que íbamos a estar mejor, cuando no tenía datos suficientes como para hacerlo».
«Nos convertimos en demagogos en todos lados, no solo en la política. La gente dice lo que la gente quiere escuchar. Estamos más pendientes del relato, de cómo pintamos la parte de afuera que de las cañerías».
«El dato de la pobreza duele porque es estructural, ya no se puede resolver creciendo. Hay gente que está laburando doce horas por día y no cubre la canasta básica».